Miami,13 de agosto de 2021.- Dos semanas antes de iniciar un diálogo en México con la oposición, el régimen de Nicolás Maduro utilizó de nuevo el sistema judicial para silenciar a un periodista, en esta ocasión se trata de Obeysser Prada, a quien un tribunal del estado Táchira, en el extremo occidental de Venezuela, emitió una orden de detención en su contra por los presuntos delitos de instigación al odio y escarnio público.
La Asociación de Periodistas Venezolanos en el Extranjero (APEVEX) repudia la persecución judicial del régimen a nuestro afiliado Obeysser Prada, y contra todos los colegas en el país, que era amenazado y acosado desde hace varios años por denunciar situaciones irregulares relacionadas con funcionarios. Tuvo que salir de Venezuela.
“Es totalmente obvio que la medida actual del régimen de Nicolás Maduro en mi contra no es más que ese proceso de criminalización y persecución política que se da en Venezuela para quienes pensamos diferente y que se va acrecentando. El régimen criminaliza sistemáticamente a todo aquel que piensa diferente utilizando poderes públicos, funcionarios y organismos de seguridad para amenazar, censurar y detener”, dijo Prada en declaraciones a APEVEX.
El periodista destacó que los patrones utilizados son persecución, detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas, procesos civiles y penales y el uso abusivo del poder. El Ministerio Público que se ha convertido en una herramienta para acallar a los periodistas que “denunciamos las irregularidades que se cometen en Venezuela por parte del régimen (…) Otra arma miserable es la Ley contra el Odio aprobada en 2017 que busca silenciar y castigar opiniones que resulten incómodas para el régimen. Esta es la situación de peligro que todos los periodistas corremos en el país”.
“Como no podemos enfrentar a un Ministerio Público viciado, que responde a los intereses de los funcionarios chavistas, pues lamentablemente tenemos que salir del país”, expresó.
La orden de prisión se le dictó el 29 de julio de 2021 tras publicar en meses previos varias informaciones sobre presuntas irregularidades cometidas por funcionarios chavistas.
Una de las informaciones es sobre un grupo de ciberterrorismo que opera en San Cristóbal, capital de Táchira, cuya sala operacional es protegida presuntamente por Freddy Bernal, el protector de ese estado. De acuerdo con la investigación que realizó Pradra y, por otra parte, trabajos de la periodista Sebastiana Barráez, coinciden en que el grupo estaría alineado con el frente 10 de la guerrilla FARC de Colombia.
Prada también publicó fotografías y comenzaron a arremeter contra él acusándolo que había expuesto al secretario general de ese grupo y le exigieron que borrara las imágenes. Lo amenazaron con hackear sus cuentas bancarias, redes sociales y teléfonos.
Al no hacerlo y denunciar las amenazas, una persona de ese grupo lo denunció en la Fiscalía por presunta incitación al odio. Padra desconoce el contenido del expediente porque no tuvo acceso al mismo y en el ministerio Público le dijeron que se trataba de un caso político. Tampoco fue notificado directamente del procedimiento judicial que se había iniciado en su contra.
Otra de las informaciones estuvo relacionada con un supuesto atropello contra varios empresarios supuestamente perpetrado por integrantes de las FAES (Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana), en el que presuntamente habría participado un hijo de Bernal.
APEVEX llama la atención sobre el caso de Prada que forma parte del feroz acoso a los periodistas por parte del régimen, en momentos en que Maduro inició este 13 de agosto de 2021 un diálogo con la oposición y entre sus demandas estaría el levantamiento inmediato de sanciones.